1. El pesado
Rosas rojas y sobre
dorado con forma de corazón. Observó con detenimiento el envío y,
sin abrir la nota, le dijo al mensajero que se había equivocado de puerta.
2. El asesino
Observó con
detenimiento la escena. La Beretta en su mano izquierda y agua inundando el
comedor. Su amigo diestro era un “suicida” que pensaba darse un baño.
3. La
pregunta
Papa, si uno más
uno son dos, ¿Por qué dice la canción que son siete? Observó con detenimiento a
su hijo pequeño y supo que había llegado la hora.
4. El sobón
La mirada fija, la
respiración pausada y la voz serena.
Observó con detenimiento al acompañante de su hija. Era la primera vez que
creía lo que le estaban contando.
Yolanda, veo que en distancias cortas también te mueves con mucha soltura. En pocas letras tus microrrelatos cuentan mucho.
ResponderEliminarDe los cuatro me quedo con "El pesado" por su visualidad.
Un abrazo.
Gracias Nicolás. Te felicito por tu relato de esta semana. Hay ocasiones en las que, hasta el propio escritor, se olvida de sus personajes.
EliminarLlevaba tres semanas sin presentarme al concurso de la Cadena Ser, por eso escribí cuatro micros, para compensar. ;)
Un abrazo.
Muy buenos los cuatro, Yolanda. No resulta fácil contar una historia en tan poco espacio.
ResponderEliminarA mí, como a Nicolás, el que más me gusta es el primero.
Un abrazo.
Muchas gracias por dejar tu comentario, Pedro. Bienvenido.
EliminarSintetizar planteamiento, nudo y desenlace en pocas palabras es algo que todos deberían intentar alguna vez.
Recuerdo un hecho que marcó bastante mi existencia. Alguien comentó la gran nota que había sacado un estudiante de Psicología. La pregunta de examen era: "¿Por qué?" La respuesta del alumno fue: "Y, ¿Por qué no?" Creo que, desde ese día, dejé de explicar los teoremas matemáticos como si fuesen comentarios de texto y dediqué mis esfuerzos a ir a la miga del asunto.
Un abrazo.
La diversidad de la gente se traduce también en muchísimos adjetivos. Debo confesar que tuve que consultar el significado de "sobón" para comprender la historia, dado que en México tiene un uso diferente al de la historia (aunque, en realidad, casi no se usa). Aparte de divertirme con el relato, me ha servido de aprendizaje. ¡Muchas gracias!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Para este padre, nadie es lo suficientemente bueno para tocar a su hija. Por ello, en su subconsciente sigue flotando la palabra “sobón”. Con el tiempo… lo verá con buenos ojos. Jajajajajaja
EliminarEs divertido toparse con los diferentes significados de las palabras. Aún recuerdo el día que leí en tu blog los múltiples usos de la palabra “madre” en México. Son tantos y tan distintos que, si algún día puedo ir a visitaros, intentaré no utilizarla.
El aprendizaje es recíproco. Gracias.
Un fuerte abrazo.
Algunos microcuentos son aforismos disfrazados o fragmentos inconexos de poemas inacabados. No es el caso de estos cuatro magníficos "pico" cuentos (ya se sabe: mili, micro, nano, pico).
ResponderEliminarSiempre he creído que detrás de cada "pico" cuento, existe una "Tera" historia. Cada aforismo disfrazado, esconde muchos axiomas elementales. En el lector queda el papel de desmigarlos y deglutirlos.
EliminarEn este caso, mis pico cuentos sólo son ráfagas dictadas por algún diablillo juguetón que hay en el interior de mi cabeza.
Gracias por tu comentario Janial.